![]() La segunda vez que estuve en Noruega en pleno invierno, a Chris y a mí nos dio un ataque de espontaneidad. Estábamos viendo en la tele un programa sobre la Aurora Boreal y se nos ocurrió buscar en línea qué tan lejos nos podía llevar un tren desde Oslo. Revisamos los itinerarios y compramos un boleto para el día siguiente hacia Bodø, un pueblito perdido en el norte de Noruega que ya está dentro del círculo polar. Nos fuimos con una caja de galletas, un montón de agua y toda la ropa térmica que teníamos. Supongo que muy poca gente tiene la valentía de sentarse en un tren por 18 horas, sobre todo porque hay aviones que te llevan en 1 hora por el mismo precio (si reservas con anticipación). Casi siempre hay conexiones en las ciudades más grandes, así que hay que parar. Salimos de Jernbanetorget hacia Trondheim. En Trondheim esperamos una hora para ir a Bodø. En el primer tren, estaba dormido un hombre con unos pies –o zapatos– increíblemente apestosos. Como los asientos son numerados, no pudimos cambiarnos de lugar, así que lo único que pude hacer fue cubrirme la cara con la cobijita que te presta el tren durante el viaje. En el segundo tramo, teníamos los asientos ejecutivos. Con mesas de piel y mejor vista, aunque todo lo que podías ver era nieve sobre más nieve y poquita luz. Estuve pegada de la ventana unas 4 horas para ver si veíamos renos, pero no tuve suerte.
Como mexicana, estudiante de ciencias y conocedora de los efectos de la rotación estelar, entiendo perfectamente el concepto de las latitudes y las estaciones, pero verlo en acción es una cosa totalmente diferente. Cuando llegamos a Bodø a las 11 a.m., la ciudad se veía exactamente igual que si fueran las 8 de la noche. Realmente nunca termina de amanecer porque los rayos del sol no llegan a esa parte del planeta durante el invierno. El cielo es de un morado de los más interesantes que he visto. Ya en Bodø, y dada la naturaleza espontánea de nuestro viaje –peor que embarazo no planeado– no teníamos idea de qué hacer, a dónde ir o dónde dormir. En la estación del tren había información turística sobre Saltstraumen, la corriente de mareas más fuerte del mundo mundial que va casi a 41 km/hr. Hay miles de anuncios por todos lados en varios idiomas. Está prohibidísimo nadar y si te atreves a navegar, nadie se hace responsable de irte a rescatar (o de buscar tus restos). Cuando pasaron las horas, porque no puedo decir que se hizo de día o de noche, era hora de encontrar un lugar dónde dormir. Con los baratísimos precios de Noruega, Chris tuvo la idea (extrema, como es su costumbre) de comprar una montañita de leña y quedarnos caminando en la calle toda la noche hasta el día siguiente, que volvieran a abrir las tiendas o cosas que pudiéramos visitar. Yo pensé que se trataba de algo así como montar guardia mientras uno dormía media hora o algo así. Después me explicó que si te quedas dormido afuera, con esas temperaturas, ya no despiertas. El cuerpo, naturalmente, suda y baja la temperatura a la hora de dormir. La respiración se vuelve mucho más lenta y al respirar aire que está a -28 ºC, el cerebro piensa que es hora de apagar los motores por hipotermia. Para no hacerla más larga, nos quedamos en el único hostal de la ciudad, el lugar más barato que encontramos (que costaba 1600 pesos por noche) porque no tenía ganas de morirme congelada ese día. Esperamos y esperamos, pero nunca logramos ver la Aurora, que normalmente ocurren cuando hay una explosión de electrones en el polo y la carga magnética baja hacia el ecuador. Sólo fuimos dos días, porque no teníamos nada planeado. Cuando regresamos a Oslo, 18 horas después, vimos en las noticias que acababa de empezar la explosión de electrones más grande de la década, aunque donde estábamos –por la contaminación lumínica– no se vio nada. Otra vez no tuve suerte. Este viaje lo hice hace 2 años, así que ya había redes sociales y, aunque no vi renos ni la Aurora, ahora sí hubo foto.
2 Comments
dr. murdock
15/10/2014 07:21:22 pm
es curioso leer como es que noruega sigue siendo el lugar mas invisitable...raro que alguien guste de visitar algo asi...pero aun asi ..para mi si es hermoso ....
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Geli
20/5/2015 06:10:43 pm
Sí hay mucho turismo pero muy poca gente va porque es uno de los países más caros del mundo. Tiene mucha naturaleza muy peculiar y, como está muy al norte, mucha gente va para ver la Aurora Boreal. Como todo, el problema no es la falta de ganas, sino la falta de dinero :p
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#GelichuCuando Angélica va de camino por un té y no tiene nada con qué escribir o está a punto de quedarse dormida, se le ocurren las mejores ideas. Más sobre ella. Notas anteriores
September 2020
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